Un informe confidencial revela que el Ejército israelí habría atacado a integrantes de la UNIFIL con fósforo blanco, causando heridos y daños en instalaciones en la frontera entre Israel y el Líbano.1
Un informe consultado por Financial Times indica que el Ejército israelí ha atacado en múltiples ocasiones a integrantes de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (UNIFIL), desplegados a lo largo de la frontera entre ambos países. Según el documento confidencial, elaborado por un país «que aporta tropas», las fuerzas israelíes irrumpieron en una base señalizada de la Organización de las Naciones Unidas y presuntamente habrían utilizado fósforo blanco —un químico incendiario prohibido— durante su incursión, hiriendo al menos a 15 miembros de la UNIFIL y causando daños significativos en las instalaciones.
El 17 de octubre, Rick Brennan, director de emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Oriente Medio, declaró que la organización recibió información sobre un gran número de heridos que ingresaron en hospitales del Líbano, posiblemente afectados por fósforo blanco tras los ataques israelíes. Este químico, conocido por sus efectos devastadores en el cuerpo humano y su capacidad para causar incendios incontrolables, está prohibido en zonas pobladas según el derecho internacional, lo que agrava la preocupación por las acciones militares en áreas civiles.
La UNIFIL ha calificado estos incidentes como una «violación flagrante del derecho internacional», expresando preocupación por la seguridad de sus tropas y por la escalada de tensiones en la región. Israel, por su parte, rechaza las acusaciones de haber «atacado deliberadamente» a las fuerzas de mantenimiento de la paz desde que inició sus operaciones terrestres en el sur del Líbano el 1 de octubre, según informa el periódico británico. Las autoridades israelíes argumentan que sus acciones están dirigidas contra amenazas específicas y que cualquier daño colateral es involuntario.
Tel Aviv sostiene que los combatientes del movimiento chií libanés Hizbulá utilizan a las fuerzas de la ONU como «escudos humanos» y operan cerca de los puestos de la UNIFIL a lo largo de la frontera. Además, Israel ha exigido a la ONU que retire a sus tropas del sur libanés por motivos de seguridad, una solicitud que ha sido rechazada por los 50 países que aportan tropas a la misión, según el Financial Times. Esta negativa refleja la importancia que la comunidad internacional otorga a la presencia de la UNIFIL en la preservación de la estabilidad regional.
A pesar de las condenas internacionales, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han causado daños en instalaciones y búnkeres que albergan a tropas de la UNIFIL, así como en torres de observación de varias bases en el Líbano. En los incidentes reportados por la misión de la ONU y detallados en el informe, miembros de las fuerzas de paz han resultado heridos. Estos acontecimientos plantean serias preocupaciones en relación con la seguridad del personal de la ONU y la viabilidad de sus operaciones en una zona cada vez más volátil.
Grupos de derechos humanos han documentado el uso de fósforo blanco por parte de Israel en sus operaciones militares en el Líbano durante 2023, según señala Financial Times. Aunque su uso está prohibido en zonas pobladas bajo el derecho internacional, se ha empleado con frecuencia por los militares contra las fuerzas contrarias. Estas acciones han generado críticas y llamados a la rendición de cuentas por parte de la comunidad internacional, mientras aumentan las preocupaciones sobre las repercusiones humanitarias y económicas del conflicto en una región ya afectada por tensiones geopolíticas.
- Fotografía propia, de archivo, correspondiente a la invasión de Israel contra el Líbano, realizada en julio de 2006. Localización original: Ayta ash Shab (sur del Líbano). ↩︎